Los Caminos de los árboles, escrito por Pep Bruno e ilustrado por Mariona Cabassa, está editado por La Fragatina.
En este libro vemos como un nieto pasa la tarde con su abuelo en el jardín viendo los árboles. El nieto le pregunta al abuelo si él puede trepar el árbol, ya que no es ni fuerte ni alto. El abuelo le cuenta cómo no es necesario ser de ninguna manera especial para conseguir las cosas que quieres, basta con tener paciencia, pensar y querer hacerlo. Como indica además si autor en el comentario, es un libro que, además, demuestra que podemos disfrutar de las pequeños placeres de la vida que no implican gastar con los seres que más queremos, como hace el abuelo con su nieto.
Como vemos, éste es un libro con dos moraleja clara. Según la propia editorial, es para niños de más de 5 años, yo lo enfocaría para niños de al menos 6 o 7 años (mi hijo de 5 años pasó un poco del libro) y creo que puede ser bueno hasta los 9 años. Pienso además que es un libro para leerlo juntos padres-hijos, y en espacial a aquellos peques que, por las razones que sean, se sienten que no podrán conseguir las cosas que quieran por como son o por lo que tienen. También es una buena opción para tener como lectura de clase si la profesora ve que hay niños que se sientan inferiores. Casi me declino más por ésta segunda opción; en cualquier caso pienso que es un libro que requiere ser leído de manera conjunta adulto-niño, explicando todas las cosas que cuenta, si queremos que las moralejas sean realmente útiles.
Éste libro llegó a mis manos gracias a la editorial, de otro modo no sé si me hubiese fijado en él (como ya sabéis, este tipo de cuentos tan “educativos en valores” no están entre mis favoritos). Pero, después de haberlo leído, pienso es un buen libro para leerlo en clase los niños que estén en tercero o cuarto de Primaria. Mi nota personal como lectora; un 6 sobre 10. Pero como digo, lo recomiendo para lectura de clase en el primer ciclo de primaria.
pulsando sobre la portada del libro
Hola Patricia, soy Pep Bruno. Primero decirte que la ilustradora se llama Mariona, no Mariana. Segundo decirte que no existe cuento que no lleve implícita una moraleja, aunque igualmente todo cuento debe entretener.
Creo que este cuento sí tiene una moraleja que no señalas en tu reseña: los pequeños placeres de la vida, los compartidos con quienes queremos, los gratuitos (esos que no cuestan dinero), son, precisamente, los que hacen brillar los días, y para llegar a ellos no hace falta ni ser más grande, o más fuerte (o tener más dinero o ser más guapo…): ver el atardecer, subir a un árbol, compartirlo…
De todas formas coincido contigo en que es un cuento ideal para lectura compartida. Aunque no entiendo eso que dices sobre “niños que se sienten inferiores”.
En fin. Gracias por dedicar tu tiempo a este cuento que hemos hecho con tanto cariño.
Un saludo
Hola Pep.
Gracias por tu comentario y perdona por no haber contestado antes.
El nombre de la ilustradora lo cambio ahora mismo. Pídele perdón de mi parte… Con respecto a lo que comentas de las moralejas, creo que tienes razón, pero también pienso que hay libros que la moraleja está más escondida que en otros libros.
También creo que tienes razón con lo que comentas de la reseña que no comento. Sobre lo que dices de la frase que no entiendes, a lo que me refería es que hay niños que piensan que no podrán conseguir lo que quieren ser o cosas que quieren porque son más torpes que los demás o por cualquier otro motivo.
Los comentarios siempre los veo como una entrada muy útil que me ayudan a mejorar. Por tanto agradezco mucho tu comentario y me comprometo a actualizar el comentario de acorde a éste.
Un saludo.
Hola Patricia,
He encontrado tu web de casualidad y me he parado a leer algunas críticas. En particular me ha llamado la atención esta reseña, pues no hace mucho que he comprado el libro. Explicas en tu comentario que las opiniones te resultan útiles para mejorar, por eso me he decidido a darte la mía por si puede aportarte algo.
Para empezar creo que deberías cuidar más la escritura, aparecen muchos errores entre tus líneas. Eso a mí me transmite poca seriedad, además de poca confianza a la hora de tener en consideración tus recomendaciones. Pienso que alguien que se permite escribir reseñas sobre libros, algunos de autores con bastante trayectoria como es este caso, debería al menos prestar más atención en eso.
Por otro lado, no dices ni una sola palabra sobre las ilustraciones. Las ilustraciones son el 50 % de un álbum ilustrado y si vas a hablar de él, deberías no olvidar esa parte fundamental. En el caso de este libro, para mí las ilustraciones son bellísimas, hacen grande al texto y se complementan a la perfección. También me falta que hables de cómo está contada la historia, bajo mi punto de vista es ligera y está muy bien escrita.
Además pienso que debes justificar tus conclusiones. A mí me ha chocado mucho que digas que este libro puede ser una buena opción para niños que se sienten inferiores. Como no explicas el porqué, como lectora no comprendo cómo llegas a esa conclusión. Quizás si añadieras algún razonamiento, podría entender y hasta compartir tu punto de vista.
Luego, lo de encasillar por edades, pues tampoco estoy de acuerdo con la franja tan estrecha que propones. Pues creo que depende también de la personalidad e intereses de cada niño. Mi hijo también tiene 5 años y claro que no comprende bien el mensaje que conlleva este cuento, pero sí que le resulta una historia entretenida y atractiva que le plantea algunas preguntas normales para su edad. Y estoy segura de que a medida que lo sigamos leyendo, cada vez irá descubriendo más cosas nuevas, hasta que un día entenderá el significado. Y eso de que es bueno hasta los 9 años, tampoco me convence. Me pregunto por qué se tiene esa costumbre de cerrar las franjas de edad en los libros. Cada vez hay más adultos, entre los que me incluyo, que compran para disfrute propio álbumes, sin ir más lejos, como éste.
Y por último, me llama la atención que digas que no son tus favoritos los libros “educativos en valores” (cosa que tampoco creo que sea este libro), cuando parece que rebuscas en ellos fines, como el comentas de que es bueno para niños que se sienten inferiores, que yo sinceramente no veo que existan por ningún lado.
Ésta es mi humilde opinión.
Mi valoración para este libro es de 9/10
Mi valoración para esta reseña es de 3/10
Saludos
Adriana
Hola Adriana,
Primero, gracias por tu comentario.
Sobre lo que comentas de cómo escribo las reseñas, simplemente comentarte que éste blog no pretende ser para nada un blog técnico y especializado, para ello ya hay muchos blogs, webs, revistas etc. realizados por gente mucho más preparadas que yo. Lo único que pretendo es dar mi sincera y humilde opinión sobre los libros que les leo a mis niños y, teniendo en cuenta lo que ellos opinan de los libros, si les gusta o no y especialmente si se lo han leído una, muchas o infinidad de veces. Porque, al fin de cuentas, los libros están escritos para ellos. No pretendo tener críticas o reseñas ni muy elaboradas ni muy complicadas, principalmente porque mi formación no es la adecuada (soy ingeniero de profesión, no filóloga). Es por ello que lo único que pretendo es dar una opinión en un formato sencillo, como si estuviésemos hablando de tú a tú. Pero no obstante, si te parece que hay errores de escritura, por algo será, así que en esto sentido intentaré tener más cuidado a partir de ahora en las cosas que escribo.
En lo referente a tu opinión del libro, pues es eso, una opinión más del libro, ni mejor ni peor que la mía. Sobre gustos, los colores. Agradezco mucho tu opinión, ya que ésta puede ayudar con el objetivo de este blog: que los padres puedan contar con diferentes opiniones a la hora de elegir qué libros compran a sus hijos.
Un saludo.